Ilustración: revólver
Después de cuatro años de ejercicio de la presente administración federal y del compromiso de consolidar económica y socialmente la Nación, el panismo ha eludido la responsabilidad de reconocer la enorme distancia que existe entre la promesa realizada a la ciudadanía para conseguir su voto y la palabra cumplida.
Se podrá argumentar que las transformaciones requieren de tiempo, que no son hechiceros para resolver los problemas en tan corto tiempo, sin embargo empeñaron la palabra, prometieron una y otra vez todo cuanto se pudo con tal de llegar al poder. Primeramente crearon expectativas y ahora se manifiestan por cancelarlas.
Hoy pasado el tiempo, recordamos aquellos compromisos que arrojaron posiciones y el ungimiento político y que con el paso del tiempo y de los días han generado desesperanza y descrédito en el ámbito social:
1.GENERAR EMPLEOS Y SER “EL PRESIDENTE DEL EMPLEO”.
La situación actual nos coloca en la peor tasa de desempleo de los últimos ocho años, con casi 15 millones de personas con capacidad para trabajar que se encuentran desocupadas o en la economía informal.
2.SI GANAS MENOS DE 5 MIL PESOS AL MES; YA NO PAGARÁS IMPUESTOS.
Todos los empleadores formales se ven obligados a pagar impuestos, quien gana 2 mil 38 pesos mensuales destina al IVA 2.9% de su ingreso y al IEPS 2.1%, un promedio de 2.5%. Es decir, la pérdida de su poder adquisitivo es de 51 pesos.
3.ELECTRICIDAD Y GAS BARATOS A TRAVÉS DEL PROGRAMA OPORTUNIDADES.
Con los gobiernos panistas el gas natural ha subido 465.9% en su costo, el combustible 253.3% y la electricidad para uso industrial 136.9%.
4.BAJAR LAS TASAS DE INTERÉS.
Las tasas de interés en México se encuentran entre las más altas de Latinoamérica, al mismo tiempo que las tarjetas de crédito cobran los intereses más caros del mundo.
5.REDUCIR EL ISR.
Derivado de la falta de liquidez en la Nación se aumentó de 28 a 30%, situación que derivó en una caída en la inversión extranjera e inhibió el empleo.
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